Tarta de queso salada.

Esta tarta, es perfecta para servir como entrante o aperitivo. La combinación de sabores resulta exquisita si te gusta el pesto, ya que su sabor es muy potente.

 

Suelo prepararla en verano, en alguna comida o cena familiar, resulta de lo más apetecible por su textura suave y fresca.

Para la base:

- 90 g de galletas saladas (yo he usado las mini bites sabor jamón de galletas gullón).

- 90 g de mantequilla 

Para el relleno:

- 300 ml de nata para montar. 

- 270 g de queso crema 

- 80 g de salsa pesto 

- 4 hojas de gelatina neutra 

- sal y pimienta a gusto. 

Para decorar:

- Tomatitos scherrys 

- Albahaca fresca morada

- cebollino 

- semillas (opcional).

PASO A PASO

Triturar las galletas y mezclar con la mantequilla derretida hasta obtener una masa.

Forrar el molde con papel vegetal y acomodar la pasta de galletas.  

Refrigerar 20 minutos aproximadamente. 

Hidratar las hojas de gelatina en un bol con agua fría. 

Batir el queso para que quede cremoso. 

Incoporar la salsa pesto y volver a mezclar. 

Calentar la nata 30 segundos en el microondas. 

Escurrir las hojas de gelatina. 

Añadir a la nata y mezclar con unas varillas hasta disolver.

Verter la nata con la gelatina en la mezcla de queso y pesto. 

Añadir sal y unas vueltas de pimienta negra molida. 

Opcional echa unas gotas de colorante verde para potenciar el color.

Mezclar todos los ingredientes hasta obtener una crema homogénea. 

Verter la mezcla en el molde sobre la base de galletas. 

Guardar en la nevera un mínimo de tres horas.

Decorar al gusto.